Hace mucho escuche esta frase y en aquel momento y circunstancia de mi vida, esta frase me fue real y fascinante…pero con el tiempo y en base a lo que llaman razones, me sumergí en lo que llamamos proyecto de vida, planificaba lo que quería y debía ser, me decía a mi misma que sin un plan no lograría mis metas, pensaba que todo lo debía tener calculado, y yo tenia razón hasta que no obtuve los resultados satisfactorios que quería, notaba que por más que yo planificara mis acciones, razonara sobre factibilidades, e imponía la lógica y la razón, no obtenía las respuestas que me había ya pre formulado.
Con la experiencia de mis actos un día me volví a replantear la hipótesis de esperar que la vida me sorprenda, no digo que ahora me siente a esperar que las cosas sucedan por si sola, no creo que tener una carrera fructuosa, una familia ordenada o un negocio rentable, se puedan lograr sin una proyección, pero estoy segura que a veces hay que entender que aunque nos esforcemos por que las cosas salgan de una manera, que por más que organicemos nuestras vidas, un día nos podemos levantar con todo un mundo diferente al que aspirábamos, a veces no muy agradable, sin dejar de ser lo que nos toca en la vida, otras veces y pienso que son las más somos afortunados de no haber obtenido lo que aspirábamos ya que lo que en verdad necesitábamos estaba ya concebido para nosotros , no por las razones humanas que se ven en el momento, sino por la voluntad del que todo lo sabe y quien se encarga de irnos renovando y dejándonos ver el verdadero propósito de nuestra razón de ser, propósito que algunos descubren rápidamente, mientras otros necesitan tiempo y espera.
Hoy me ilusiona la idea de cual será la sorpresa que me tiene preparada el creador, y bueno a veces me dejo llevar por la curiosidad y trato de ser yo quien le sorprenda ¿?uhuh., O solo estoy cumpliendo lo que ya El tenia dispuesto para mí.
