martes, febrero 24, 2009

el tiempo


Todos queremos que corra el tiempo, nos pasamos cada etapa de la vida deseando que llegue la siguiente, esperando. Nos armamos de sueños y esperanzas y al ver que no se cumplen, confiamos en que se cumplirán.

Y perdemos ese tiempo, nuestra vida va pasando mientras nosotros nos empeñamos en hacer de todo excepto en disfrutarla.
Siempre soñamos con lo que creemos no tener.
Aunque estén delante de nuestros ojos, nos empeñamos en no ver los momentos dulces y cálidos, nos gusta sufrir y pensar que "mañana" seremos felices, que nos esperan buenos momentos, somos tan cobardes que creemos que nos merecemos que el resto de nuestra vida sea maravillosa en vez de luchar desde "ya" por ello.

Todos queremos que corra el tiempo, hasta que corre, entonces nos damos cuenta de que los sueños no se han cumplido con el paso del tiempo y deseamos volver atrás. Nos torturamos, entonces, con la idea de que antes éramos felices, que no hemos sabido aprovechar los momentos que ahora consideras que eran buenos, lo que nos hace perder aún más tiempo.

Todos queremos que corra el tiempo, tememos a la rutina, pero en realidad nos da tanto miedo porque la rutina es la que hace que el tiempo corra tan deprisa que ni siquiera podamos darnos cuenta de ello, ella hace que parezca que ha transcurrido un día cien mil veces cuando, en realidad, han transcurrido cien mil días.
Y cuando las personas nos damos cuenta de ello... ya es tarde.